Escasez de trabajadores cualificados y disponibilidad limitada de recursos informáticos, rápido cambio de las condiciones ambientales para la industria: sólo quienes puedan adaptar sus procesos de forma elevada y rápida o dispongan de sistemas de producción cambiantes podrán sobrevivir frente a la evolución actual.Una de las claves centrales para sobrevivir en este nuevo mundo es la digitalización consecuente.Lo que en teoría parece sencillo, en la práctica resulta difícil para muchas empresas.La razón: la larga historia de los sistemas ERP -y en algunos casos también de las soluciones MES- ha creado entornos de sistemas muy funcionales pero al mismo tiempo monolíticos.